viernes, 9 de noviembre de 2007

Oh Dios mio!, ¿soy feliz?

Hace unos días iba en el coche escuchando la radio sin apenas entusiasmo, como dirían los Pistones. Estaba hablando un chavalín de un grupo que acababa de "editar su segundo trabajo" (que cursis son en la radio). Los temas (=canciones) hablaban invariablemente de chicas que no le querían, o le engañaban, o pasaban de él... el pobre vivía un sin-vivir de sufrimiento y abandono reiterado.

La aguda periodista, percatada ella de la desazón que traslucían tan amargas letras, le preguntó al apenado cantamañanas que si el sufrimiento era su fuente de inspiración, a lo que el jilguerillo se apresuró a contestar que efectivamente, que cuando sufres tienes la necesidad de expresar cosas, y por el contrario, cuando estás bien no.

Quedeme por un momento perplejo pensando que llevaba bastante tiempo sin escribir... Oh Dios mio ¿sere feliz acaso por ventura? Acordeme en ese preciso instante de la consabida máxima repetida por los sabios e intelectuales contemporaneos: "Solo los idiotas son felices".

Ni que decir tiene que, atando cabos, pensé "hace tiempo que no se me ocurre nada para escribir.... ¿querrá decir ello que todo me va bien y que por tanto soy feliz y por ende bobo?". Yo soy muy de atar cabos y de preocuparme por bobadas, de manera que inmediatamente ocupé mi mollera en estúpidas disquisiciones que me desazonaron notablemente durante un largo periodo de tiempo (de y cuarto a y media). He de decir que me preocupa especialmente la potencial consideración de mi persona como tonto, no se por qué, si es porque me creo muy listo, o porque siento la irrefrenable necesidad de demostrar empiricamente que no soy bobo del todo. En fin, manias. Cuando estaba a punto de estallar, haciendo un esfuerzo me tomé unos minutos para analizar la situación: "Vamos a ver, con mi mujer bien, aunque discutimos de vez en cuando como todo el mundo. Status matrimonial: NORMAL; los niños muy ricos y muy monos, pero se siguen poniendo malos de vez en cuando y siendo un poco rebeldes a veces. Status paterno-filial: NORMAL; en el trabajo, sin novedades, ni buenas, ni malas; Status laboral: NORMAL; salud, unicamente colesterol que vigilar y achaques propios de la edad (cualquiera que me oiga), es decir, Status: NORMAL... por tanto, con gran alborozo compruebo que NO SOY FELIZ!!!!... y por tanto tampoco idiota... uff!!! que alivio".
Después de este tormentoso razonamiento, se abrieron las nubes de mi entendimiento y los rayos de sol de la razón iluminaron mi sereno espiritu (por qué no un toque Gongoriano a este prosaico escrito), llegando a la conclusión que el idiota era el chavalín cantamañanas y su colección de estúpidos tópicos... además, y si soy feliz ¿que?... al menos yo no me paso el día llorando por petardas que me abandonan... Chaval, espabila, que chicas hay más que botellines, hombre.

No hay comentarios: